martes, 16 de diciembre de 2008

Bala


Durante un momento estuve parado, lo sé. Durante un instante lo pude ver. Pude ver sus ojos, furiosos, llenos de un odio que nunca había podido ver en nadie. Odio, ¿qué hice yo para que me odiara de esa forma? No tengo respuestas, sólo preguntas, y mucho miedo. Por un momento siento que realmente se acabó, que realmente no hay más camino que recorrer. Que mi cruzada por avanzar en la vida ha llegado a su fin.

Bum, bum, bum, bum. Puedo escuchar mi corazón latir. El tipo me dice cosas, no las entiendo. No logro escuchar nada de lo que me quiere decir. Sólo veo sus gestos, me apunta con su arma y grita, o eso logro entender. De alguna forma, todo está distorsionado y en mi cabeza resuena todo menos su voz: puedo escuchar un sonido de una moto partiendo a lo lejos, mientras busco alguna ayuda.

Bum, bum, bum, bum. El final se acerca, lo sé. No se como, pero lo sé. Lo veo venir. Bum, bum, bum, bum.

Llega otra persona, otra imagen, otra sombra. Otro desconocido que no se por qué me odia en esta ocasión. Miro al cielo, no veo nada salvo un color medio rojizo.

Bum, bum, bum, bum. El rojizo empieza a pasar al verde, y de allí al morado. Empieza a llover, pero llueve rojo. Sangre, llueve sangre, sangre que sabe a una coca light caliente, puaj... mala lluvia. Pero el cielo sigue moviendose, danzando, cambiando, avanzando, como burlándose de que yo no pueda hacer lo mismo y demostrandome algo importante. No tengo tiempo ahora de entender lo que me dice, no puedo aprender la lección.

Bum, bum, bum, bum. Los tipos gritan, se gritan, me gritan. Uno de ellos toma el arma y dispara al lado derecho de mi cabeza, parece que es zurdo él. Siento un calor en mi sien, y la danza termina. Todo se va a negro, y alcanzó a escuchar, en fade out "¿viste? te dije que no le iba a doler" Y es cierto, no duele, pero no hay nada más.

1 comentario:

Janoma dijo...

Es rica la coca light, pero es malísima caliente.